Sobre Percepcion: Tercera Entrega (y última)
21. He comprobado con frecuencia que los pesimistas dicen 10 siguiente de los optimistas: «Tú no eres realista», pero esta manifestación constituye un error conceptual que acarrea serias consecuencias. Si un vaso es lo suficientemente grande como para contener aproximadamente un litro de agua, y ahora sólo contiene la mitad, ¿Cuál sería la realidad? La realidad es que contiene sólo la mitad de su capacidad. No obstante algunas personas dirán que está medio lleno y otras que está medio vacío. En lo que concierne a la realidad ambos enfoques son correctos. Sin embargo, observamos que algunos eligen estar agradecidos por el agua que tienen, en tanto que los otros escogen sentirse molestos por lo que les falta. Este ejemplo familiar encierra la verdad de todos los aspectos de la vida. Estamos constantemente escogiendo aquello en que concentraremos nuestra atención, y la manera en que habremos de enfocarlo. Resulta perjudicial considerar rígidamente a la realidad en una forma contraproducente, cuando podrías elegir formas positivas de encarar las cosas.
Hacia fines de la Segunda Guerra Mundial, Simón Wiesenthal, el renombrado cazador de criminales nazis, estaba en un campo de concentración; un recién llegado al lugar introdujo de contrabando un Siddur (libros de oraciones), y Wiesenthal admiró su coraje, porque al arriesgarse al ser descubierto podría llegar a perder la vida. Sus sentimientos pronto cambiaron, cuando descubrió que el «valeroso» contrabandista estaba permutando quince minutos de alquiler del Siddur a cambio de la cuarta parte de la magra ración diaria. Los reclusos estaban desnutridos, pero voluntariamente aceptaron el intercambio. Al tiempo el propietario del Siddur murió, antes que ningún otro, debido a que las enormes cantidades de sopa que ingirió resultaron excesivas para su deteriorado organismo.
Después de la guerra, el Rabino Eliezer Silver visitó los campos de Personas Desplazadas en nombre de la organización Vaad Hatzalah. Organizó plegarias y dirigió palabras de aliento a los sobrevivientes. Luego de notar que Wiesenthal no había concurrido a la sinagoga, el Rabino Silver decidió visitarlo. Según lo relata el propio señor Wiesenthal, ocurrió lo siguiente: «Aquella noche el Rabino Silver vino a verme. Era un hombre de baja estatura que vestía un uniforme americano sin insignia militar. Tenía una pequeña barba blanca y sus ojos brillantes irradiaban una gran bondad; debía tener por lo menos setenta y cinco años de edad, pero su mente era aguda y su voz juvenil.
«El puso su mano sobre mi hombro. «Me dijeron que estás enfadado con el Todopoderoso, me habló en Idisch y me sonrió.
«No con El, sino con uno de Sus servidores», y le contó lo que había pasado.
«El continuó sonriendo «¿Y esto es todo lo que tienes que decirme?»
«¿No es esto suficiente, Rabino?» le pregunté.
«Du Dummer (tú, hombre tonto)» dijo él. «¿De modo que solamente buscas al hombre que tomó algo?» ¿Por qué no buscas en cambio a los hombres que dieron algo?» Me tocó con la palma de su mano extendida y se marchó.
«Concurrí a los servicios religiosos del día siguiente. Desde entonces he tratado de recordar que existen dos aspectos para cada problema.» (Los asesinos están entre nosotros, págs. 249-250, y Ama a tu prójimo, pág. 346).
22. Trata de pensar de manera creativa, y tendrás la posibilidad de enfocar situaciones y acontecimientos familiares bajo una nueva perspectiva. Esto te permitirá tener nuevas y más positivas respuestas emocionales para aquellas situaciones y acontecimientos, que anteriormente te ocasionaron incomodidad, tristeza y enojo.
Por ejemplo, la crianza de los niños, puede considerarse como una difícil tarea dolorosa a largo término. Puede sin embargo considerarse también como un maravilloso y excitante desafío: Moldear y educar a un ser humano para aprovechar todo su potencial. Un padre que sostenga el primer punto de vista hallará su vida insoportable, mientras que otro progenitor con el segundo enfoque hallará constantemente la plena realización de sus propósitos en esta tarea.
Durante la Segunda Guerra Mundial el Rabino Moshe Schwab se encontraba en Londres durante un bombardeo a la ciudad. En una ocasión la casa de sus padres fue blanco de las bombas poco después que la familia bajara a su refugio. El Rabino Schwab le relató este incidente al Rabino Elyahu Lopian y le describió el intenso pánico que experimentaron durante el bombardeo, el Rabino Lopian comentó: «Rav Mosche, cuán afortunado eres de haber experimentado el miedo a la muerte» (Maarjai Laiv, pág.25).
23. Aún un acto tal como el de lavar los platos, puede tener distintas connotaciones para diferentes personas. Para algunos representará una labor tediosa pero necesaria, en tanto que para otros podría significar un descanso de tareas físicas más pesadas. Para algunos puede representar una oportunidad para concentrar el pensamiento en temas trascendentes sin ser molestados, o para escuchar cintas grabadas con temas inspiradores, mientras que las manos efectúan los movimientos mecánicos. Otros la encontrarán como una tarea degradante, que les fue impuesta por las circunstancias, en tanto que algunos verán en ella un acto de bondad hacia su familia o sus amigos. ¿Cuál sería entonces la realidad? Es simplemente la de alguien que está lavando los platos, pero la forma en que este hecho ha de afectar emocionalmente a cada uno, dependerá de su propia interpretación subjetiva. Todo individuo tiene la capacidad de evaluar sus tareas de distinta manera de un día a otro. Felices de aquellas personas que pueden dominar coherentemente su poder de raciocinio, de tal manera que promueva su felicidad y elevación espiritual.
24. Resulta fácil sentirse frustrado y desdichado cuando se cometen errores, se podrá no obstante aprender de esos errores y falencias y si los utilizas como experiencias de aprendizaje Podrás darles un enfoque positivo. A pesar que hubieras preferido no cometerlos, ellos serán ahora como peldaños que te conducirán a tu crecimiento.
25. Cuando las cosas no resulten como te hubiese agradado y veas que todavía puedes enfrentarías, utiliza esta experiencia como una lección para no sentirte excesivamente atribulado ante la posibilidad que surjan situaciones similares en el futuro.
26. Cuando despiertes en el medio de la noche o tengas una larga espera en el consultorio del médico, aprecia esos momentos como espacios de tiempo para pensar. Una persona sensata hará uso de esas oportunidades para aprender más acerca de sí mismo, y para pensar en las formas en que puede superarse (Alai Shur, pág. 167).
27. Todos nosotros tenemos respuestas para la pregunta de cómo enfocar la vida en general. Aún aquellas personas que no hayan formulado concientemente su punto de vista al respecto lo manifestarán en forma implícita. Algunos ven la vida como una aventura, plena de excitación y de oportunidades de alcanzar logros, mientras que para otros la vida se avisora como una experiencia dolorosa que debe soportarse. Independientemente de la forma como hayas encarado tu vida en el pasado, puedes comenzar a adoptar una actitud más positiva, si realizas un esfuerzo coherente para generar pensamientos de línea positiva. El solo tomar conciencia que esto constituye tu elección, te proporcionará un considerable grado de control sobre tus ideas y contribuirá a tu superación personal.
28. Si tratas de eliminar por la fuerza pensamientos negativos concernientes a algún problema, descubrirás con frecuencia que cuanto más trates de deshacerte de dichos pensamientos, éstos se radicarán con mayor fuerza en tu mente (Rabino Israel Salanter: Tnuas Hamussar, Vol. l, pág.284).
No trates de imponer coercitivamente un pensamiento positivo, en forma suave y gradual procura buscar formas más positivas de encarar las cosas. Podría resultarte útil que te preguntaras: «¿Qué forma positiva podría recomendarle a otra persona para el tratamiento de este asunto?»
29. Por momentos tu situación puede ser dolorosa, pero cabrá la posibilidad de que pudo haber sido aún mucho peor. Quizás te sientas resentido cuando alguien te diga: «Esto podría ser peor». Sin embargo, si tú mismo te das cuenta que las cosas están realmente mejor de lo que pudieron haber sido, estarás en condiciones de poder tolerar la situación. Cada vez que los hechos sucedan de manera distinta a tus deseos no dejes de preguntarte: «¿podrían haber sido peores?»
Analiza por ejemplo que si te han robado, al menos no te han herido. Si te hirieron, al menos no te quitaron la vida. Si estás aburrido, al menos no te encuentras en peligro. Si no tienes una abultada cuenta bancaria, al menos no tienes deudas, y si las tuvieras por lo menos no estás físicamente dañado por no pagarlas en término. Si la lluvia hubiese desbaratado tus planes anteriores, no sufrirás al menos por la falta de agua, lo cual resultaría mucho peor que cancelar tus planes a causa de la lluvia. Si no puedes afrontar la compra de un par de zapatos nuevos, por lo menos tienes tus pies. Si el precio de los alimentos es elevado, al menos hay suficiente provisión de los mismos y puedes adquirir algunos.
Ciertas personas podrán considerar esta forma de razonamiento como un modo peculiar de observar las cosas. ¿Pero entonces preferirías sentirte peor de lo que corresponde? ¿Quieres elegir la opción de sentirte feliz? La raíz de la lamentaciones consiste en pensar que la situación pudo ser mejor, en cambio el fundamento de la satisfacción reside en el convencimiento de que la situación pudo haber sido peor. En casi todos los casos las cosas pudieron ser tanto peores como mejores. Para dominar la felicidad las personas necesitan mentalizarse constantemente que todo aconteció mejor de lo que pudo haber sido.
30. En sus últimos años, el Rabino Yejezkel Levenstein escribió que aquellas situaciones que comenzaron ocasionándole sufrimiento, fueron finalmente causales de buena suerte (Ohr Yejezkel: Mijtavim, pág.326).
Jamás podremos realmente tener la absoluta certeza que ningún acontecimiento sea verdaderamente perjudicial para nosotros. ¿Por qué adjudicarle a un hecho la condición definitiva de negativo, cuando puede transformarse de una manera tal que veas claramente que te resulte beneficioso?
Zelig Pliskin