La manifestación y aprehensión de la Realidad
«En la actual fase de desarrollo de la humanidad los mashalím son imprescindibles para llegar al Nimshál»
El mashál tiene dos «movimientos»:
1) Del interior hacia el exterior: la revelación y manifestación del Nimshál por medio del mashál.
2) Del exterior hacia el interior: la aprehensión del Nimshál a través del mashál.
El maestro, desde el interior –Nimshál– revela la Sabiduría a través de diferentes mashalím.
El discípulo, desde el exterior, va introduciéndose gradualmente a través de los diferentes niveles del mashál hasta comprender el Nimshál.
El proceso educativo a través de la Kabalá amplía permanentemente la percepción logrando mashalím cada vez más cercanos al Nimshál hasta unificarlos. Como dice el profeta:
En ese día EL y Su Nombre serán Uno.
Zacarías 14:9
EL indica el Nimshál, la Esencia que «Está» detrás del nombre, aquello que nos proponemos aprehender, la «cosa en sí» (ver item 4).
Su Nombre señala el mashál, forma a través de la cual Lo conocemos.
En la actual fase de desarrollo de la humanidad los mashalím son imprescindibles para llegar al Nimshál. En cambio, cuando la humanidad se desarrolle, tal como lo expresa la ya mencionada profecía de Jeremías, el egoísmo habrá desaparecido de la faz de la tierra, y «… no enseñará más ninguno a su prójimo… porque todos Me conocerán».
Entonces no habrá más necesidad de mashalím (ver item 32).