Dieta Kasher
Extraido de Revista Kesher
Pregunta
Desde que comencé a comer kasher se ha instalado una gran tensión en la familia. A mi hermana le duele que no coma en su casa y cree que me comporto como si me creyera superior. Mis padres dicen que estoy destrozando a la familia. ¿Qué puedo hacer?
Respuesta
Hoy en día existen cientos de dietas. Siempre que un grupo de amigos se reúne para comer, alguno dirá algo como: “No puedo comer nada aquí, estoy siguiendo la dieta de Mutkin”, o “No puedo comer carbohidratos después de las diez de la mañana”, o “Solamente puedo comer guisantes y sandía hasta la próxima luna llena”.
Este tipo de comentarios no suelen generar mucha polémica; si deciden pasar hambre, es su problema. Pero cuando alguien dice: “No puedo comer nada aquí porque como solo kasher”, la reacción no suele ser tan intrascendente. Por alguna razón, los judíos se sienten desafiados por otros judíos más observantes que ellos, y a menudo lo toman como un ataque personal.
Lo que tu hermana interpreta cuando le dices que no puedes comer su comida es que ella no es lo suficientemente buena para ti, que ella no es una verdadera judía como tú. Mientras tú te referías a tus propios hábitos alimenticios, ella escuchaba un juicio sobre su identidad judía. Esta no es una reacción racional. Quizás ella escucha en tus palabras la voz subconsciente de su alma judía, que anhela vivir una vida más judía.
Sea lo que sea, tu trabajo es mantener la paz. Debes dejar claro que, de ninguna manera, comiendo kasher estás juzgando o condenando a nadie; simplemente has tomado una decisión sobre tus propias prácticas religiosas. No le estás pidiendo a nadie que cambie sus costumbres, sino solamente que respeten el cambio que tú has adoptado. Es tu responsabilidad mantener una buena relación con tu familia, y debes estar dispuesto a hacer todo lo posible para conseguirlo. Continúa visitando a tu hermana y organiza la comida kasher para ti.
No seas muy exigente e intenta ser lo más flexible posible. Si lo manejas bien, acercarás a la familia porque terminarán respetándose y entendiéndose entre todos mucho mejor que antes. La dieta kasher es una dieta espiritual. No te garantiza que bajes de peso o que te sientas más saludable, pero pretende mejorar el espíritu. Sé el ejemplo palpable de un alma refinada por la comida kasher con la forma en la que tratas a tu familia.
Aaron Moss